Las radios clásicas de sobremesa siguen siendo a día de hoy unos aparatos que no puede faltar en algunos hogares, ya que además de servirnos para informarnos y entretenernos son de aquellos objetos que contribuyen a que nos sintamos a gusto en casa, a lo que habría que añadir también su puesta en valor en los últimos tiempos como objetos vintage para la decoración de la viviendas.
Las radios de toda la vida tienen un encanto muy especial que resiste al paso del tiempo. Así, pese a la proliferación de dispositivos tecnológicos que han sustituido en la mayor parte a estos aparatos, estos continúan formando parte del paisaje doméstico de millones de hogares porque más allá de su funcionalidad, siguen siendo unos objetos que están relacionados con nuestro sentido de la cotidianidad. Es decir, que forman parte del selecto grupo de elementos de los que necesitamos rodearnos en casa para tener la sensación de sosiego y bienestar doméstico.
Las radios de sobremesa acompañan a infinidad de personas a todas horas.
Las radios de sobremesa o transistores son todavía las ventanas al mundo por antonomasia de quienes quieren estar bien informados o distraerse ya sea desde que empieza el día o para terminarlo.
Resultan, asimismo, el acompañante perfecto mientras preparamos la comida o la cena, así como un elemento indispensable para hacer más llevaderas las tareas domésticas más repetitivas y tediosas. Y por la noche, una de las mejores aliadas posibles, ayudando a desconectar de las preocupaciones diarias y el estrés (incluyendo el digital), para poder relajarnos en la cama y conciliar un sueño reparador.
Aunque no solo se utilizan con esta finalidad, ya que mucha gente que trabaja o prepara exámenes de madrugada recurren a este aparato de radio como un compañero imprescindible para ayudarles a concentrarse o amenizar la velada.
La radio de sobremesa posibilitó el desarrollo de un medio de comunicación de masas.
A la hora de explicar el apego que tenemos en España a las radios de sobremesa hay que tener en cuenta que son las grandes impulsoras de un medio de comunicación de masas, cuyo éxito se cifra en los millones de oyentes que según los EGM tienen todavía a día de hoy las emisoras, aunque ahora llegan a su público tanto a través de los clásicos aparatos de toda la vida o las radios de los coches, como smartphones o dispositivos multimedia vía internet, ya sea en directo o en formato podcast.
Para hacernos una idea de lo que supone la radio en nuestro país, hay una anécdota muy ilustrativa protagonizada por Fabio Capello en su primera etapa como entrenador del Real Madrid, cuando al ser preguntado al poco de su llegada por las cosas que más le habían llamado la atención de España, citó como una de las más sorprendentes que existiesen programas de radio sobre fútbol con audiencias millonarias que comenzasen a las doce de la noche.
Las radios de sobremesa son mucho más que unos simples aparatos.
Actualmente pese a la amplia oferta de entretenimiento existente continúa siendo un medio muy vivo, que lejos de pasar de moda sigue teniendo un encanto muy especial, al igual que el aparato que simboliza todo su espíritu: la radio de sobremesa, que además disfruta ahora de un gran atractivo vintage a efectos decorativos, el cual nos vincula con nuestro pasado y nos transmite sensación de tranquilidad, formando parte en definitiva de ese paisaje cotidiano que resulta imprescindible para tener la sensación de que estamos en casa.
En DEF tenemos una gran devoción por estos aparatos clásicos, por eso ofrecemos en nuestro catálogo un fantástico modelo de radio de sobremesa blanca que destaca por sus excelentes prestaciones, conjugando una impecable emisión de sonido con un gran encanto estético. ¡Contáctanos para hacer tu pedido y podrás obtener a un precio muy económico un aparato que aportará muchísimo a tu hogar!